Estoy pagando mis deudas. La de los gorritos ya está medio saldada, pueden ver el post anterior a éste, y ahora toca la de un lindo regalo que me llevaron al estudio. ¡Un libro lleno de botones! Mi querida Margarita que, aunque no lo crea, piensa en todo y en todos, dejó a su pequeña Bárbara con un libro menos en su estantería y me trajo este maravilloso y divertido libro. Un gran detalle. Otro que se suma a la lista de los que Margarita ha tenido conmigo.