Cuando hablamos de sesiones especiales, nos referimos a aquellas que se salen un poco de lo de siempre. Por ejemplo, las sesiones de hadas, o de indios y vaqueros que hacemos en el Parque del Retiro. De hecho, las sesiones en el Parque siempre son «especiales». También lo son las del primer cumpleaños, las que sólo son para los abuelos, las con mascotas en el Parque, las de Navidad, las del día del padre o de la madre, etc. Especiales como lo serán todas las que vayan surgiendo por el camino porque tú nos las pidas o porque se nos ocurran a nosotras.